Mantenía la web de un cliente, un site corporativo con catálogo de productos industriales. El cliente me llama apurado:
[Cliente] – Necesito tu ayuda, es por algo urgente en la categoría XX, y las fotos.
[Yo] – ¿Qué sucede?
[Cliente] – Hay que cambiar urgentemente el tono gris del borde de esas fotos (las imágenes tenían «1px solid gray»). Pero dejar igual el resto. Esto es superimportante.
[Yo] – Er… bueno, puedo añadir una regla CSS de emergencia, que modifique ese color (rollo «.cat-xx .featuredImg border tal…), pero ¿cual quiere?
[Cliente] – Debe ser un gris un poco más oscuro.
[Yo] – (Pensando en el tono de urgencia del tipo) le puse un «darkgray». Tiro mucho de nombres de color para este tipo de chorradas…
[Cliente] (Después del típico rollo de «borre su caché y recargue») – Mejor pero mmmmh… un momento… a verrrr… ya. Mira ¿me puedes poner el #54545B ?
[Yo] (Flipando que el tipo había abierto el inspector y se había puesto a trastear con el color picker, para obtener una variación mínima) Si claro sin problema. Ya lo tiene.
[Cliente] – Genial, perfecto gracias. Es que hoy viene este proveedor y les tengo que enseñar la web, y las fotos de sus productos quedaban muy deslucidas con el bordecito gris claro. (Esto le puso en alerta máxima)
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